viernes, 6 de marzo de 2009

Actividades pro-vida


Los legisladores católicos deben legislar en defensa de la vida

Al término de la audiencia general de este miércoles, Benedicto XVI tuvo un encuentro con Nancy Pelosi, presidenta de la Cámara de Representantes de los Estados Unidos, a quien le recordó que la Iglesia está en contra del aborto y que los católicos, especialmente los legisladores, deben promover "un ordenamiento jurídico que proteja la vida humana en todas las etapas de su desarrollo".

En un breve comunicado de la Oficina de Prensa de la Santa Sede se informó del encuentro con la señora Pelosi, quien pese a confesarse católica, apoya abiertamente el aborto y la anticoncepción.
En el texto del comunicado se indica que "Su Santidad aprovechó la ocasión para explicar que la ley moral natural y la constante enseñanza de la Iglesia sobre la dignidad de la vida humana desde la concepción hasta la muerte natural imponen a todos los católicos, y especialmente a los legisladores, a los juristas y a los responsables del bien común de la sociedad, cooperar con todos los hombres y las mujeres de buena voluntad para promover un ordenamiento jurídico justo que proteja la vida humana en todas las etapas de su desarrollo".

Pelosi, que se define a sí misma como católica, fue fuertemente criticada por los obispos de su país a causa de sus posiciones abortistas y la bioética en general, motivos por los que la Iglesia católica le niega la comunión. En abril del año pasado, la exponente del Partido Demócrata escandalizó a la jerarquía estadounidense al comulgar en la misa que el mismo Papa Benedicto XVI celebró en el Yankee Stadium de Nueva York, con ocasión de la visita pastoral que el Pontífice realizó a Estados Unidos.

El encuentro con Pelosi fue el primero mantenido por el Papa con un miembro de la nueva administración americana de Barack Obama. A su vez, Pelosi enmarcó su visita al Vaticano en su viaje oficial a Italia, durante el que se entrevistó con las principales autoridades del país, como el presidente de la República, Giorgio Napolitano, el primer ministro, Silvio Berlusconi, y el presidente de la Cámara de los Diputados, Gianfranco Fini.

Llamamiento del episcopado estadounidense

En estos días, la Conferencia Episcopal de Estados Unidos lanzó un llamado a los católicos para que se opongan al proyecto de "Ley de Libre Elección", que varios grupos radicales están promoviendo en el Congreso. De aprobarse, esta ley federal supondría la derogación de todas las legislaciones contrarias o restrictivas del aborto en las leyes de los distintos Estados norteamericanos.
El pasado 5 de febrero, el cardenal Justin Rigali, arzobispo de Philapelphia y presidente de la Comisión Episcopal de Actividades Pro Vida, hizo un llamado al Congreso a no modificar la legislación actual sobre el aborto.
El purpurado recuerda en su carta que "legisladores de diferentes tendencias, desde hace tiempo, acordaron que los estadounidenses no deberían ser obligados por el Gobierno a apoyar o participar en el aborto contra su voluntad".
"Estas y otras leyes similares han sido efectivas durante muchos años, sin importar qué partido controlaba el Congreso o la Casa Blanca, porque son políticas de sentido común, consensuadas, que fueron ampliamente apoyadas, incluso entre gente que está en desacuerdo sobre el estatus legal del aborto", añade.

Hace pocas semanas, los obispos norteamericanos hacían público su rechazo a una de las primeras medidas adoptadas por el Presidente Obama, de derogar la prohibición de destinar fondos federales a la promoción del aborto, conocida como "Política Ciudad de México".+

AICA, 19-2-09

La defensa de la vida suaviza las tensiones católicos-judíos

El rabino Yehuda Levin, portavoz de la Unión de Rabinos Ortodoxos de Estados Unidos y Canadá, visitó a altos miembros de la Curia Romana para lograr el apoyo de la Iglesia en su oposición a una “marcha del orgullo gay” que tendrá lugar en Jerusalén a finales de este año.
Espera que el Vaticano y el nuncio apostólico en Israel puedan ayudarle a crear una coalición con otras religiones y denominaciones para bloquear la marcha.
La información fue difundida por la agencia Zenit, de Roma, en una nota firmada por Edward Pentin, y traducida del inglés por Justo Amado.

Neoyorkino sensato y de lenguaje directo -dice la nota-, Levin tiene un celo misionero por defender la causa provida. Cree firmemente en que, cuando se trata de las relaciones judíos-católicos, defender la vida y la familia debería sobreponerse a controversias como la negación del Holocausto hecha por el obispo lefebvrista Richard Williamson.

"Se están dando en nuestros hijos casos de Sida moral -dice Levin, padre de nueve hijos-. No digo que no haya lugar para eso [la discusión sobre Williamson] sino que deberíamos preguntarnos ¿Qué podemos hacer para salvar bebés y salvar las mentes de nuestros hijos sabiendo lo que está bien y lo que está mal en temas de vida y familia?".

En la actual controversia Levin da su pleno respaldo a Benedicto XVI. "Hay gente que dice que el Papa Benedicto es antisemita e insensible. Esto es ridículo", dice. "Él [el Papa] tiene un largo camino de décadas de antinazismo y simpatía por los judíos". Levin también dice que entiende lo que el Papa está intentando hacer tendiendo la mano a los tradicionalistas porque ellos tienen algunas "cosas muy importantes" que aportar al catolicismo.

"Lo apoyo totalmente. ¿Por qué? Porque entiendo todo el cuadro, que es que la Iglesia católica tiene un problema con la extrema izquierda que está haciendo un daño inmenso a la fe". La izquierda, dice Levin, "está ayudando a destruir y corromper los valores de la Iglesia y esto tiene un efecto cascada en todas las comunidades religiosas del mundo". Apunta que una Iglesia de 1.250 millones de miembros no puede ser fácilmente ignorada. "Cuando usted estornuda -advierte-, los demás nos resfriamos, porque nos afecta lo que ocurre".

El rabino Levin también pide perdón por la reacción de algunos de sus compañeros judíos. "Mis chicos no han actuado con gran sofisticación", dice. "Si él [el Papa] inadvertidamente incluye a alguien que es importante en dicho movimiento y que dice cosas extrañas, ¿es ésta una razón para tirar al bebé con el agua del baño y comenzar en seguida a condenar al Papa Benedicto?", pregunta. "En modo alguno".
El rabino Levin, que todos los años participa en la Marcha por la Vida en Washington, tiene poco tiempo para la nueva administración de los Estados Unidos. Advierte acerca de la "obamificación" de la sociedad, es decir, los esfuerzos del presidente Obama por lograr un consenso en el debate del aborto.
Obama, dice "no lo está consiguiendo". Una mujer no puede estar "un poquito embarazada", ni es posible estar de acuerdo un "poquito con el matrimonio homosexual" y luego estar en contra del matrimonio homosexual. "No puedes ser todas las cosas para toda la gente", dice el rabino Levin. "Él [Obama] está prostituyendo los valores y, como estadounidense, me siento ofendido. Cree que somos mudos".

Fuente AICA

(www.diario7.blogspot.com, 17-2-09)


No matar a la persona por nacer
Por Jorge Horacio Gentile (*)

El Código Civil dice que: "El acto ilícito ejecutado a sabiendas y con intención de dañar la persona o los derechos de otro, se llama en este Código delito" (art. 1072). El codificador agrega que: "La palabra delito tiene en derecho civil una significación diferente de la que tiene en el derecho criminal. El derecho civil designa toda acción ilícita por la cual una persona a sabiendas e intencionalmente perjudica los derecho de otra. En el derecho criminal, designa toda infracción definida y castigada por la ley penal. No todos los delitos civiles constituyen delitos del derecho criminal, porque la ley penal no castiga todos los actos que atacan los derechos de otros (...)".

El Código Penal castiga con reclusión o prisión a los abortos practicados con y sin el consentimiento de la mujer, sean ellos dolosos (art. 85) o culposos (art. 87), pero admite dos excusas absolutorias: "1. Si se ha hecho con el fin de evitar un peligro para la vida o la salud de la madre y si ese peligro no puede ser evitado por otros medios. 2. Si el embarazo proviene de una violación o un atentado al pudor cometido sobre una mujer idiota o demente. En este caso el consentimiento de su representante legal deberá ser requerido para el aborto" (art. 86). Exime de pena, además, la tentativa de aborto. (arts. 88)

La Academia Nacional de Ciencias Morales y Políticas acaba de recordar que: "Las excusas absolutorias previstas en el art. 86 del Código Penal, que se intenta ampliar en el proyecto de "aborto no punible" que se encuentra en trámite (...)de la Cámara de Diputados de la Nación(...)", fueron incorporadas al mencionado ordenamiento punitivo a propuesta de la Comisión de Códigos del H. Senado de la Nación, formulada en el dictamen expedido el 26 de setiembre de 1919. En dicho dictamen, la Comisión fundó su propuesta en doctrinas eugenésicas y racistas que se encontraban en boga, sin advertir sus adherentes que las mismas conducirían y servirían de sustento al régimen nacional socialista instaurado en Alemania a partir de 1933."

Al auspiciar la no punibilidad de la interrupción provocada de la gestación practicada en una mujer "idiota o demente" que hubiera sido violada, la Comisión expresó que "era la primera vez que una legislación va a atreverse a legitimar el aborto con un fin eugenésico, para evitar que de una mujer idiota o enajenada..., nazca un ser anormal o degenerado". Argumentó seguidamente sobre "el interés de la raza", y se preguntó, citando doctrina española, "¿qué puede resultar de bueno de una mujer cretina o demente?". En definitiva, la Comisión consideró que "es indiscutible que la ley debe consentir el aborto cuando es practicado, con intervención facultativa, a los fines del perfeccionamiento de la raza".

"Con esos argumentos racistas, que pocos años después contribuyeron al establecimiento de un régimen demencial que empujó al mundo a la segunda guerra mundial, que no vaciló en inmolar a minusválidos, judíos, cristianos y gitanos, y que persiguió a todos los que se opusieron a sus designios totalitarios, se introdujeron en el Código Penal las excusas absolutorias que ahora se intenta ampliar en el Congreso de la Nación".

"Las excusas absolutorias del art. 86 del Código Penal resultan manifiestamente inconstitucionales ante textos explícitos que amparan de modo irrestricto al niño por nacer desde el instante de su concepción. Por eso, en un fallo reciente, la Corte Suprema de Justicia de la Nación ha recordado que "el derecho a la vida es el primer derecho natural de la persona humana, preexistente a toda legislación positiva, y que resulta garantizado por la Constitución Nacional (...), derecho presente desde el momento de la concepción, reafirmado con la incorporación de tratados internacionales con jerarquía constitucional".

El médico Tabaré Vázquez, presidente socialista de Uruguay, al vetar en estos días la ley que autorizaba el aborto afirmó que: "Hay consenso en que el aborto es un mal social que hay que evitar. Sin embargo, en los países en que se ha liberalizado el aborto, éstos han aumentado.

En los Estados Unidos, en los primeros diez años, se triplicó, y la cifra se mantiene: la costumbre se instaló. Lo mismo sucedió en España".

"La legislación no puede desconocer la realidad de la existencia de vida humana en su etapa de gestación, tal como de manera evidente lo revela la ciencia. La biología ha evolucionado mucho. Descubrimientos revolucionarios, como la fecundación in vitro y el ADN con la secuenciación del genoma humano, dejan en evidencia que desde el momento de la concepción hay allí una vida humana nueva, un nuevo ser.

Tanto es así que en los modernos sistemas jurídicos -incluido el nuestro- el ADN se ha transformado en la ´prueba reina´ para determinar la identidad de las personas, independientemente de su edad, incluso en hipótesis de devastación, o sea cuando prácticamente ya no queda nada del ser humano, aun luego de mucho tiempo.
El verdadero grado de civilización de una nación se mide por cómo se protege a los más necesitados. Por eso se debe proteger más a los más débiles. Porque el criterio no es ya el valor del sujeto en función de los afectos que suscita en los demás, o de la utilidad que presta, sino el valor que resulta de su mera existencia. (...)

"Por otra parte, al regular la objeción de conciencia de manera deficiente, el proyecto aprobado genera una fuente de discriminación injusta hacia aquellos médicos que entienden que su conciencia les impide realizar abortos, y tampoco permite ejercer la libertad de conciencia de quien cambia de opinión y decide no realizarlos más. Nuestra Constitución sólo reconoce desigualdades ante la ley cuando se fundan en los talentos y virtudes de las personas. Aquí, además, no se respeta la libertad de pensamiento de un ámbito por demás profundo e íntimo.

Este texto también afecta la libertad de empresa y de asociación, cuando impone a instituciones médicas con estatutos aprobados según nuestra legislación, y que vienen funcionando desde hace más de cien años en algún caso, a realizar abortos, contrariando expresamente sus principios fundacionales".

"El proyecto, además, califica erróneamente y de manera forzada, contra el sentido común, el aborto como acto médico, desconociendo declaraciones internacionales como las de Helsinki y Tokio, que han sido asumidas en el ámbito del Mercosur, que vienen siendo objeto de internalización expresa en nuestro país desde 1996 y que son reflejo de los principios de la medicina hipocrática que caracterizan al médico por actuar a favor de la vida y de la integridad física.

"De acuerdo a la idiosincrasia de nuestro pueblo, es más adecuado buscar una solución basada en la solidaridad que permita promocionar a la mujer y a su criatura, otorgándole la libertad de poder optar por otras vías y, de esta forma, salvar a los dos. Es menester atacar las verdaderas causas del aborto en nuestro país y que surgen de nuestra realidad socio-económica. Existe un gran número de mujeres, particularmente de los sectores más carenciados, que soportan la carga del hogar solas. Para ello, hay que rodear a la mujer desamparada de la indispensable protección solidaria, en vez de facilitarle el aborto".

Estas razones, a las que adhiero, me eximen de mayores comentarios.

(*) Profesor de Derecho Constitucional de las Universidades Nacional y Católica de Córdoba y fue diputado de la Nación.

Diario Los Andes
www.politicaydesarrollo.com.ar, 22-Jan-2009



Pólíticos y gobernantes: el derecho a la objeción de conciencia

P. Jorge Enrique Mújica

Balduino I, rey de Bélgica, se negó a firmar la ley que permitía el aborto en su país en marzo de 1990 aduciendo razones de conciencia. Su caso ha sido uno de los precedentes más famosos por venir de una personalidad del talante que él poseía. El rey de los belgas no dudó en abdicar a la corona con tal de mantenerse fiel a lo que creía que no estaba bien.

A casi dos décadas de distancia, varios políticos y gobernantes de diversos países están recordando al mundo el valor de la fidelidad a la propia conciencia, aun a costa del estigma de retrógrados y de la persecución mediática de que son presas.

Enrique I es el gran duque de Luxemburgo (jefe de Estado de ese enclave europeo) y sobrino del finado Balduino de Bélgica. El primero de diciembre, Enrique I anunció que no firmaría la ley de autorización de la eutanasia y del suicidio asistido por motivos de conciencia. La iniciativa de ley prosperó el pasado 18 de diciembre de este año 2008 en la cámara de diputados por 31 votos a favor, 26 en contra y 3 abstenciones. La negativa del gran duque ha motivado a los políticos a reducirle sus poderes.

“La vida y la muerte no están en nuestras manos”. La reina de España se ha manifestado contraria al aborto, a la eutanasia y al así llamado “matrimonio” homosexual. Así ha quedado de manifiesto en el libro entrevista que le ha realizado la escritora Pilar Urbano, “La Reina muy de cerca”, un libro que apareció el 29 de octubre de 2008 con ocasión del LXX cumpleaños de doña Sofía y que va totalmente contra corriente de la situación actual que se vive en el reino de la península ibérica.
Uruguay es quizá el país de mayor tradición liberal y laicista en el cono sur de América. Su actual presidente, el médico Tabaré Vázquez, se rehusó a firmar una ley que despenalizaba el aborto. En el texto del veto, Tabaré Vázquez recordó que “La legislación no puede desconocer la realidad de la existencia de vida humana en su etapa de gestación, tal como de manera evidente lo revela la ciencia”.
Y más adelante señaló que “el verdadero grado de civilización de una nación se mide por cómo se protege a los más necesitados. Por eso debe proteger más a los más débiles. Porque el criterio no es ya el valor del sujeto en función de los afectos que suscita en los demás, o de la utilidad que presta, sino el valor que resulta de su mera existencia”.
La decisión del presidente uruguayo le valió las críticas de los miembros de su propio partido (el Partido Socialista) y únicamente el apoyo de dos de los ministros de todo su gabinete, los de salud y turismo. A finales del mes de noviembre de 2008, Tabaré Vázquez, hasta entonces miembro de la internacional socialista y de la coalición Frente Amplio que le llevó a la presidencia, pidió la baja del partido en el que militaba desde 1983.

Mercedes Aroz es la ex senadora socialista elegida con el mayor número de votos en la historia de la provincia de Barcelona. En 2007 anunció su conversión al catolicismo y renunció a su escaño en el senado. Todavía como parlamentaria, se abstuvo de votar a favor de la regulación de las uniones homosexuales y de apoyar posturas contra la vida que defendía el Partido Socialista Obrero Español (PSOE). Recientemente ha unido su voz a la de todos aquellos que piden la abolición del aborto en España para que realmente progresen los derechos humanos en su país.

Fernando Ferrín Calamita fungía como magistrado en materia de familia en Murcia, España, hasta que el lobby gay lo tomó en la mira por dudar de la idoneidad de una pareja de lesbianas para adoptar una niña. A pocos les ha importado las razones aducidas para la negativa (falta de la figura paterna, probabilidad de que la menor imite el patrón del ambiente en que ha vivido, o el derecho de la niña a vivir en una familia compuesta por personas de distinto sexo, entre otras).
Por eso fue relevado temporalmente de su puesto, privado de sueldo y actualmente en juicio con el consecuente peligro de perder la toga por haber sido fiel a su conciencia y buscar el bien de la infante. “No es igual ser educado y crecer con tus padres que con dos “mamás” o dos “papás”. Una ley no puede ir en perjuicio de los menores”, declaró hace algunos meses.
A veces hay que remar contra corriente con tal de defender la belleza y la primacía de la verdad. Y es que jamás la verdad es fruto del consenso democrático. Ya lo decía Sócrates: “voy a obedecer a Dios antes que a vosotros”. Y Dios habla a través de la conciencia por lo que hay que serle fiel aunque cueste la fama o la corona.

“Santo Tomás Moro”
Centro de Estudios Políticos y Sociales

Discurso que Benedicto XVI dirigió este lunes a los miembros de la Curia Romana y de la Gobernación de la Ciudad del Vaticano en el tradicional encuentro de intercambio de felicitaciones con motivo de la Navidad.

Señores cardenales,
venerados hermanos en el episcopado y en el presbiterado,
queridos hermanos y hermanas:

La Navidad del Señor está a las puertas. Cada familia siente el deseo de reunirse, para disfrutar la atmósfera única e irrepetible que esta fiesta es capaz de crear. También la familia de la Curia Romana se encuentra esta mañana, siguiendo una bella tradición, gracias a la cual tenemos la alegría de encontrarnos e intercambiarnos las felicitaciones navideñas en este particular clima espiritual. Dirijo a cada uno mi saludo cordial, lleno de reconocimiento por la apreciada colaboración prestada al sucesor de Pedro.

Surgen particularmente ante los ojos tres acontecimiento específicos del año que está por concluir. Ha estado ante todo la Jornada Mundial de la Juventud en Australia, una gran fiesta de la fe, que ha reunido a más de 200.000 jóvenes de todas partes el mundo y les ha acercado no sólo externamente --en sentido geográfico-- sino, con su contagiante alegría alegría de ser cristianos, también interiormente. Junto a ello hubo dos viajes, uno a los Estados Unidos y otro a Francia, en los que la Iglesia se ha hecho visible ante el mundo y para el mundo como una fuerza espiritual que indica caminos de vida y, mediante el testimonio de la fe, trae la luz al mundo. Fueron días que irradiaban luminosidad, irradiaban confianza en el valor de la vida y en el empeño por el bien. Por último, hay que recodar el Sínodo de los Obispos: pastores procedentes de todo el mundo se reunieron alrededor de la Palabra de Dios, que había sido alzada en medio de ellos; en torno a la palabra de Dios, cuya gran manifestación se encuentra en la Sagrada Escritura.

La alegría, como fruto del Espíritu Santo. De este modo, hemos llegado al tema central de Sydney que era precisamente el Espíritu Santo. Desde esta perspectiva, quisiera mencionar a modo de síntesis la orientación implícita de este tema. Teniendo en cuenta el testimonio de la Escritura y de la Tradición, se pueden reconocer con facilidad cuatro dimensiones en el tema del "Espíritu Santo".

1. Ante todo está la afirmación que nos presenta el inicio de la narración de la creación: en ella se habla del Espíritu creador que aletea por encima de las aguas, crea el mundo y lo renueva continuamente. La fe en el Espíritu creador es un contenido esencial del Credo cristiano. El hecho de que la materia lleva en sí una estructura matemática, está llena de espíritu, es el fundamento sobre el que se basan las modernas ciencias de la naturaleza. Sólo porque la materia está estructurada de manera inteligente, nuestro espíritu es capaz de comprenderla y de remodelarla activamente. El hecho de que esta estructura inteligente procede del mismo Espíritu creador que también nos ha donado el espíritu, implica al mismo tiempo una tarea y una responsabilidad. En la fe sobre la creación está el fundamento último de nuestra responsabilidad con la tierra. No es simplemente una propiedad nuestra, de la que nos podemos aprovechar según nuestros intereses y deseos. Es más bien don del Creador, quien ha diseñado los ordenamientos intrínsecos y de este modo nos ha dado señales de orientación que debemos respetar como administradores de su creación. El hecho de que la tierra, el cosmos, reflejen al Espíritu creador, significa también que sus estructuras racionales --que más allá del orden matemático, en el experimento, se hacen casi palpables-- llevan en sí una orientación ética. El Espíritu que las ha plasmado es más que matemática, es el Bien en persona que, a través del lenguaje de la creación, nos indica el camino hacia el recto camino.

Dado que la fe en el Creador es una parte esencial del Credo cristiano, la Iglesia no puede y no debe limitarse a transmitir a sus fieles sólo el mensaje de la salvación. También tiene una responsabilidad con la creación y tiene que cumplir esta responsabilidad en público. Y, al hacerlo, no sólo tiene que defender la tierra, el agua, el aire, como dones de la creación que pertenecen a todos. Tiene que proteger también al hombre contra su propia destrucción. Es necesario que haya algo como una ecología del hombre, entendida en el sentido justo. Cuando la Iglesia habla de la naturaleza del ser humano como hombre y mujer y pide que se respete este orden de la creación no está exponiendo una metafísica superada Aquí se trata, de hecho, de la fe en el Creador y de la escucha del lenguaje de la creación, cuyo desprecio significaría una autodestrucción del hombre y, por tanto, una destrucción de la obra misma de Dios.

Lo que con frecuencia se expresa y entiende con el término "gender", se sintetiza en definitiva en la autoemancipación del hombre de la creación y del Creador. El hombre quiere hacerse por su cuenta, y decidir siempre y exclusivamente sólo sobre lo que le afecta. Pero de este modo vive contra la verdad, vive contra el Espíritu creador. Los bosques tropicales merecen, ciertamente, nuestra protección, pero no menos la merece el hombre como criatura, en la que está inscrito un mensaje que no contradice a nuestra libertad, sino que es su condición. Grandes teólogos de la Escolástica han calificado el matrimonio, es decir, el lazo para toda la vida entre el hombre y la mujer, como sacramento de la creación, instituido por el Creador y que Cristo --sin modificar el mensaje de la creación-- acogió después en la historia de su alianza con los hombres. Forma parte del anuncio que debe ofrecer la Iglesia el testimonio a favor del Espíritu creador presente en la naturaleza en su conjunto y de manera especial en la naturaleza del hombre creado a imagen de Dios. A partir de esta perspectiva, habría que leer la encíclica Humanae vitae: la intención del Papa Pablo VI era la de defender el amor contra la sexualidad como consumo, el futuro contra la pretendida exclusiva del presente, y la naturaleza del hombre contra su manipulación.

2. Permitidme una breve mención ulterior sobre las demás dimensiones de la pneumatología. Si el Espíritu creador se manifiesta ante todo en la grandeza silenciosa del universo, en su estructura inteligente, la fe, además de esto, nos dice algo inesperado: es decir, este Espíritu habla también, por así decir, con palabras humanas, ha entrado en la historia y, como fuerza que plasma la historia, es también un Espíritu que habla, es más, es Palabra que en los escritos del Antiguo y del Nuevo Testamento nos sale al encuentro. Lo que esto significa para nosotros lo ha expresado maravillosamente san Ambrosio, en una de sus cartas: "También ahora, mientras leo las divinas Escrituras, Dios pasea en el Paraíso" (Epístola 49, 3). También hoy nosotros, al leer la Escritura podemos como vagar por el jardín del Paraíso y encontrar a Dios que se pasea por allí: entre el tema de la Jornada Mundial de la Juventud en Australia y el tema del Sínodo de los Obispos se da una profunda relación interior. Los dos temas, "Espíritu Santo" y "Palabra de Dios" van juntos. Leyendo la Escritura aprendemos, si embargo, que Cristo y el Espíritu Santo son inseparables entre sí. Cuando Pablo afirma con una síntesis desconcertante: "El Señor es el Espíritu" (2 Corintios 3, 17), no sólo está mostrando, como telón de fondo, la unidad trinitaria entre el Hijo y el Espíritu Santo, sino también y sobre todo su unidad en la historia de la salvación: en la pasión y resurrección se arrancan los velos del sentido meramente literal y se hace visible la presencia del Dios que está hablando. Al leer la Escritura junto a Cristo aprendemos a escuchar en las palabras humanas la voz del Espíritu Santo y descubrimos la unidad de la Biblia.

3. De este modo, hemos llegado a la tercera dimensión de la pneumatología, que consiste precisamente en el hecho de que Cristo y el Espíritu Santo no pueden separarse. Esto se muestra de la manera quizá más bella en la narración de san Juan sobre la primera aparición del Resucitado ante los discípulos: el Señor sopla sobre sus discípulos y de este modo les da el Espíritu Santo. El Espíritu Santo es el soplo de Cristo. Y como el soplo de Dios en la mañana de la creación había transformado el polvo del suelo en el hombre viviente, del mismo modo el soplo de Cristo nos acoge en la comunión ontológica con el Hijo, nos hace una nueva creación. Por este motivo, el Espíritu Santo nos hace decir junto con el Hijo: "¡Abbá, Padre!" (Cf. Juan 20, 22; Romanos 8, 15).

4. De este modo, como cuarta dimensión, emerge espontáneamente la relación entre el Espíritu y la Iglesia. Pablo, en la Primera Carta a los Corintios 12 y en Romanos 12, presentó la Iglesia como Cuerpo de Cristo y como organismo del Espíritu Santo, en el que los dones del Espíritu Santo funden a los individuos en una unidad viviente. El Espíritu Santo es el Espíritu del Cuerpo de Cristo. En el conjunto de este Cuerpo encontramos nuestra tarea, vivimos los unos para los otros y los unos en dependencia de los otros, viviendo en profundidad de Aquél que vivió y sufrió por todos nosotros y que a través de su Espíritu nos atrae hacia sí en la unidad de todos los hijos de Dios. "¿Quieres tú también vivir del Espíritu de Cristo? Entonces debes estar en el Cuerpo de Cristo", dice Agustín en este sentido (Tr. in Jo. 26, 13).

De este modo, con el tema del "Espíritu Santo", que orientaba las jornadas de Australia y, de manera algo más escondida, también las semanas del Sínodo, se hace visible toda la amplitud de la fe cristiana, una amplitud que de la responsabilidad por la creación y por la existencia del hombre en sintonía con la creación lleva, a través de los temas de la Escritura y de la historia de la salvación, hasta Cristo y de allí a la comunidad viviente de la Iglesia, en sus diferentes órdenes de responsabilidad, así como también en su amplitud y libertad, que se expresa tanto en la multiplicidad de los carismas como en la imagen pentecostal de la multitud de las lenguas y culturas.

La fiesta es parte integrante de la alegría. La fiesta se puede organizar, la alegría no. Sólo puede ofrecerse como don; y, de hecho, se nos ha dado en abundancia: por eso nos sentimos agradecidos. Así como Pablo califica la alegría fruto del Espíritu Santo del mismo modo también Juan, en su Evangelio, ha unido íntimamente el Espíritu y la alegría. El Espíritu nos da la alegría. Y es la alegría. La alegría es el don en el que todos los demás dones están resumidos. Es la expresión de la felicidad, del estar en armonía consigo mismos, algo que sólo puede derivarse de estar en armonía con Dios y con su creación. Forma parte de la naturaleza de la alegría el irradiarse, tener que comunicarse. El espíritu misionero de la Iglesia no es más que el impulso por comunicar la alegría que se nos ha dado. Que siempre esté viva en nosotros y, después, que se irradie en el mundo en sus tribulaciones: este es mi auspicio para finales de este año. Junto con un sentido agradecimiento por todas vuestras fatigas y obras, os deseo a todos que esta alegría, que se deriva de Dios, se nos dé abundantemente también en el Año Nuevo.

Confío estos deseos a la intercesión de la Virgen María, Mater divinae gratiae, pidiéndola poder vivir las festividades navideñas en la alegría y en la paz del Señor. Con estos sentimientos, os imparto de corazón a todos vosotros y a la gran familia de la Curia Romana la bendición apostólica.

[Traducción del original italiano realizada por Inma Álvarez y Jesús Colina]

© Copyright 2008 - Libreria Editrice Vaticana]

Extractado de: ZENIT.org


Distinguen a diputados por su defensa de los niños por nacer

Premio “Rosa Parks” al Valor ciudadano en la Defensa de los Derechos Humanos 2008

Los diputados nacionales Nora Raquel Ginzburg, Paula Bertol y Hugo Acuña fueron distinguidos con el “Premio Rosa Parks” que otorga anualmente la Defensoría de la Vida Humana (DVH) en reconocimiento del “valor ciudadano en la defensa de los derechos humanos”, en reconocimiento a su trabajo parlamentario en favor de la búsqueda de una adecuada conciliación entre los derechos de la mujer y el igualmente válido derecho de los niños y niñas por nacer, de acuerdo con los avances superadores de la ciencia actual”.

El acto de entrega de las distinciones se realizó el pasado 4 de diciembre en la sede de la Sociedad Científica Argentina y en dicha oportunidad también fueron premiados el diario La Nación y la Fundación Banco de Alimentos.

La Nación, según explicó la doctora Elisa Schaer, presidenta de la DVH, recibió este premio “por la actualidad científica y la valentía intelectual del pensamiento que expresan sus editoriales en la defensa de los derechos humanos de los niños y niñas por nacer frente a diferentes proyectos legislativos inspirados en corrientes del pensamiento eliminacionista, que admite la existencia de dos categorías de persona: las disponibles y las que pueden disponer sobre la vida de otros”.

La Fundación Banco de Alimentos, por su parte, fue galardonada “por su trayectoria y compromiso social ejemplar con los sectores más sumergidos, y en particular, por su solidaria y eficiente tarea de distribución de alimentos para comedores populares”.
La entidad que anualmente distribuye el galardón es una organización no gubernamental, que en materia de derechos humanos promueve especialmente los derechos de los niños y niñas por nacer.
El nombre de esta distinción recuerda a una mujer afroamericana que en 1955 se negó a ceder su asiento a un hombre blanco en un transporte público, por lo cual terminó en la cárcel dando así inicio al movimiento por los derechos civiles en los Estados Unidos, que luego encabezaría Martin Luther King.

Un envío de AICA

Mensaje para la Jornada Mundial de la Paz 2009
Combatir la pobreza, construir la paz
Mensaje de Su Santidad Benedicto XVI para la celebración de la Jornada Mundial de la Paz
1. TAMBIÉN EN ESTE AÑO NUEVO que comienza, deseo hacer llegar a todos mis mejores deseos de paz, e invitar con este Mensaje a reflexionar sobre el tema: Combatir la pobreza, construir la paz. Mi venerado predecesor Juan Pablo II, en el Mensaje para la Jornada Mundial de la Paz de 1993, subrayó ya las repercusiones negativas que la situación de pobreza de poblaciones enteras acaba teniendo sobre la paz. En efecto, la pobreza se encuentra frecuentemente entre los factores que favorecen o agravan los conflictos, incluidas las contiendas armadas. Estas últimas alimentan a su vez trágicas situaciones de penuria. « Se constata y se hace cada vez más grave en el mundo –escribió Juan Pablo II– otra seria amenaza para la paz: muchas personas, es más, poblaciones enteras viven hoy en condiciones de extrema pobreza. La desigualdad entre ricos y pobres se ha hecho más evidente, incluso en las naciones más desarrolladas económicamente. Se trata de un problema que se plantea a la conciencia de la humanidad, puesto que las condiciones en que se encuentra un gran número de personas son tales que ofenden su dignidad innata y comprometen, por consiguiente, el auténtico y armónico progreso de la comunidad mundial ».1

2. En este cuadro, combatir la pobreza implica considerar atentamente el fenómeno complejo de la globalización. Esta consideración es importante ya desde el punto de vista metodológico, pues invita a tener en cuenta el fruto de las investigaciones realizadas por los economistas y sociólogos sobre tantos aspectos de la pobreza. Pero la referencia a la globalización debería abarcar también la dimensión espiritual y moral, instando a mirar a los pobres desde la perspectiva de que todos comparten un único proyecto divino, el de la vocación de construir una sola familia en la que todos –personas, pueblos y naciones– se comporten siguiendo los principios de fraternidad y responsabilidad.

En dicha perspectiva se ha de tener una visión amplia y articulada de la pobreza. Si ésta fuese únicamente material, las ciencias sociales, que nos ayudan a medir los fenómenos basándose sobre todo en datos de tipo cuantitativo, serían suficientes para iluminar sus principales características. Sin embargo, sabemos que hay pobrezas inmateriales, que no son consecuencia directa y automática de carencias materiales. Por ejemplo, en las sociedades ricas y desarrolladas existen fenómenos de pobreza relacional, moral y espiritual: se trata de personas desorientadas interiormente, aquejadas por formas diversas de malestar a pesar de su bienestar económico. Pienso, por una parte, en el llamado « subdesarrollo moral »2 y, por otra, en las consecuencias negativas del « superdesarrollo ».3 Tampoco olvido que, en las sociedades definidas como « pobres », el crecimiento económico se ve frecuentemente entorpecido por impedimentos culturales, que no permiten utilizar adecuadamente los recursos. De todos modos, es verdad que cualquier forma de pobreza no asumida libremente tiene su raíz en la falta de respeto por la dignidad trascendente de la persona humana. Cuando no se considera al hombre en su vocación integral, y no se respetan las exigencias de una verdadera « ecología humana »,4 se desencadenan también dinámicas perversas de pobreza, como se pone claramente de manifiesto en algunos aspectos en los cuales me detendré brevemente.

Pobreza e implicaciones morales

3. La pobreza se pone a menudo en relación con el crecimiento demográfico. Consiguientemente, se están llevando a cabo campañas para reducir la natalidad en el ámbito internacional, incluso con métodos que no respetan la dignidad de la mujer ni el derecho de los cónyuges a elegir responsablemente el número de hijos 5 y, lo que es más grave aún, frecuentemente ni siquiera respetan el derecho a la vida. El exterminio de millones de niños no nacidos en nombre de la lucha contra la pobreza es, en realidad, la eliminación de los seres humanos más pobres. A esto se opone el hecho de que, en 1981, aproximadamente el 40 % de la población mundial estaba por debajo del umbral de la pobreza absoluta, mientras que hoy este porcentaje se ha reducido sustancialmente a la mitad y numerosas poblaciones, caracterizadas, por lo demás, por un notable incremento demográfico, han salido de la pobreza. El dato apenas mencionado muestra claramente que habría recursos para resolver el problema de la indigencia, incluso con un crecimiento de la población. Tampoco hay que olvidar que, desde el final de la Segunda Guerra Mundial hasta hoy, la población de la tierra ha crecido en cuatro mil millones y, en buena parte, este fenómeno se produce en países que han aparecido recientemente en el escenario internacional como nuevas potencias económicas, y han obtenido un rápido desarrollo precisamente gracias al elevado número de sus habitantes. Además, entre las naciones más avanzadas, las que tienen un mayor índice de natalidad disfrutan de mejor potencial para el desarrollo. En otros términos, la población se está confirmando como una riqueza y no como un factor de pobreza.

4. Otro aspecto que preocupa son las enfermedades pandémicas, como por ejemplo, la malaria, la tuberculosis y el sida que, en la medida en que afectan a los sectores productivos de la población, tienen una gran influencia en el deterioro de las condiciones generales del País. Los intentos de frenar las consecuencias de estas enfermedades en la población no siempre logran resultados significativos. Además, los países aquejados de dichas pandemias, a la hora de contrarrestarlas, sufren los chantajes de quienes condicionan las ayudas económicas a la puesta en práctica de políticas contrarias a la vida. Es difícil combatir sobre todo el sida, causa dramática de pobreza, si no se afrontan los problemas morales con los que está relacionada la difusión del virus. Es preciso, ante todo, emprender campañas que eduquen especialmente a los jóvenes a una sexualidad plenamente concorde con la dignidad de la persona; hay iniciativas en este sentido que ya han dado resultados significativos, haciendo disminuir la propagación del virus. Además, se requiere también que se pongan a disposición de las naciones pobres las medicinas y tratamientos necesarios; esto exige fomentar decididamente la investigación médica y las innovaciones terapéuticas, y aplicar con flexibilidad, cuando sea necesario, las reglas internacionales sobre la propiedad intelectual, con el fin de garantizar a todos la necesaria atención sanitaria de base.

5. Un tercer aspecto en que se ha de poner atención en los programas de lucha contra la pobreza, y que muestra su intrínseca dimensión moral, es la pobreza de los niños. Cuando la pobreza afecta a una familia, los niños son las víctimas más vulnerables: casi la mitad de quienes viven en la pobreza absoluta son niños. Considerar la pobreza poniéndose de parte de los niños impulsa a estimar como prioritarios los objetivos que los conciernen más directamente como, por ejemplo, el cuidado de las madres, la tarea educativa, el acceso a las vacunas, a las curas médicas y al agua potable, la salvaguardia del medio ambiente y, sobre todo, el compromiso en la defensa de la familia y de la estabilidad de las relaciones en su interior. Cuando la familia se debilita, los daños recaen inevitablemente sobre los niños. Donde no se tutela la dignidad de la mujer y de la madre, los más afectados son principalmente los hijos.

6. Un cuarto aspecto que merece particular atención desde el punto de vista moral es la relación entre el desarme y el desarrollo. Es preocupante la magnitud global del gasto militar en la actualidad. Como ya he tenido ocasión de subrayar, « los ingentes recursos materiales y humanos empleados en gastos militares y en armamentos se sustraen a los proyectos de desarrollo de los pueblos, especialmente de los más pobres y necesitados de ayuda. Y esto va contra lo que afirma la misma Carta de las Naciones Unidas, que compromete a la comunidad internacional, y a los Estados en particular, a “promover el establecimiento y el mantenimiento de la paz y de la seguridad internacional con el mínimo dispendio de los recursos humanos y económicos mundiales en armamentos” (art. 26) ».6

Este estado de cosas, en vez de facilitar, entorpece seriamente la consecución de los grandes objetivos de desarrollo de la comunidad internacional. Además, un incremento excesivo del gasto militar corre el riesgo de acelerar la carrera de armamentos, que provoca bolsas de subdesarrollo y de desesperación, transformándose así, paradójicamente, en factor de inestabilidad, tensión y conflictos. Como afirmó sabiamente mi venerado Predecesor Pablo VI, « el desarrollo es el nuevo nombre de la paz ».7 Por tanto, los Estados están llamados a una seria reflexión sobre los motivos más profundos de los conflictos, a menudo avivados por la injusticia, y a afrontarlos con una valiente autocrítica. Si se alcanzara una mejora de las relaciones, sería posible reducir los gastos en armamentos. Los recursos ahorrados se podrían destinar a proyectos de desarrollo de las personas y de los pueblos más pobres y necesitados: los esfuerzos prodigados en este sentido son un compromiso por la paz dentro de la familia humana.

7. Un quinto aspecto de la lucha contra la pobreza material se refiere a la actual crisis alimentaria, que pone en peligro la satisfacción de las necesidades básicas. Esta crisis se caracteriza no tanto por la insuficiencia de alimentos, sino por las dificultades para obtenerlos y por fenómenos especulativos y, por tanto, por la falta de un entramado de instituciones políticas y económicas capaces de afrontar las necesidades y emergencias. La malnutrición puede provocar también graves daños psicofísicos a la población, privando a las personas de la energía necesaria para salir, sin una ayuda especial, de su estado de pobreza. Esto contribuye a ampliar la magnitud de las desigualdades, provocando reacciones que pueden llegar a ser violentas. Todos los datos sobre el crecimiento de la pobreza relativa en los últimos decenios indican un aumento de la diferencia entre ricos y pobres. Sin duda, las causas principales de este fenómeno son, por una parte, el cambio tecnológico, cuyos beneficios se concentran en el nivel más alto de la distribución de la renta y, por otra, la evolución de los precios de los productos industriales, que aumentan mucho más rápidamente que los precios de los productos agrícolas y de las materias primas que poseen los países más pobres. Resulta así que la mayor parte de la población de los países más pobres sufre una doble marginación, beneficios más bajos y precios más altos.

Lucha contra la pobreza y solidaridad global

8. Una de las vías maestras para construir la paz es una globalización que tienda a los intereses de la gran familia humana.8 Sin embargo, para guiar la globalización se necesita una fuerte solidaridad global,9 tanto entre países ricos y países pobres, como dentro de cada país, aunque sea rico. Es preciso un « código ético común »,10 cuyas normas no sean sólo fruto de acuerdos, sino que estén arraigadas en la ley natural inscrita por el Creador en la conciencia de todo ser humano (cf. Rm 2,14-15). Cada uno de nosotros ¿no siente acaso en lo recóndito de su conciencia la llamada a dar su propia contribución al bien común y a la paz social? La globalización abate ciertas barreras, pero esto no significa que no se puedan construir otras nuevas; acerca los pueblos, pero la proximidad en el espacio y en el tiempo no crea de suyo las condiciones para una comunión verdadera y una auténtica paz. La marginación de los pobres del planeta sólo puede encontrar instrumentos válidos de emancipación en la globalización si todo hombre se siente personalmente herido por las injusticias que hay en el mundo y por las violaciones de los derechos humanos vinculadas a ellas. La Iglesia, que es « signo e instrumento de la íntima unión con Dios y de la unidad de todo el género humano »,11 continuará ofreciendo su aportación para que se superen las injusticias e incomprensiones, y se llegue a construir un mundo más pacífico y solidario.

9. En el campo del comercio internacional y de las transacciones financieras, se están produciendo procesos que permiten integrar positivamente las economías, contribuyendo a la mejora de las condiciones generales; pero existen también procesos en sentido opuesto, que dividen y marginan a los pueblos, creando peligrosas premisas para conflictos y guerras. En los decenios sucesivos a la Segunda Guerra Mundial, el comercio internacional de bienes y servicios ha crecido con extraordinaria rapidez, con un dinamismo sin precedentes en la historia. Gran parte del comercio mundial se ha centrado en los países de antigua industrialización, a los que se han añadido de modo significativo muchos países emergentes, que han adquirido una cierta relevancia. Sin embargo, hay otros países de renta baja que siguen estando gravemente marginados respecto a los flujos comerciales. Su crecimiento se ha resentido por la rápida disminución de los precios de las materias primas registrada en las últimas décadas, que constituyen la casi totalidad de sus exportaciones. En estos países, la mayoría africanos, la dependencia de las exportaciones de las materias primas sigue siendo un fuerte factor de riesgo. Quisiera renovar un llamamiento para que todos los países tengan las mismas posibilidades de acceso al mercado mundial, evitando exclusiones y marginaciones

10. Se puede hacer una reflexión parecida sobre las finanzas, que atañe a uno de los aspectos principales del fenómeno de la globalización, gracias al desarrollo de la electrónica y a las políticas de liberalización de los flujos de dinero entre los diversos países. La función objetivamente más importante de las finanzas, el sostener a largo plazo la posibilidad de inversiones y, por tanto, el desarrollo, se manifiesta hoy muy frágil: se resiente de los efectos negativos de un sistema de intercambios financieros –en el plano nacional y global– basado en una lógica a muy corto plazo, que busca el incremento del valor de las actividades financieras y se concentra en la gestión técnica de las diversas formas de riesgo. La reciente crisis demuestra también que la actividad financiera está guiada a veces por criterios meramente autorefenciales, sin consideración del bien común a largo plazo. La reducción de los objetivos de los operadores financieros globales a un brevísimo plazo de tiempo reduce la capacidad de las finanzas para desempeñar su función de puente entre el presente y el futuro, con vistas a sostener la creación de nuevas oportunidades de producción y de trabajo a largo plazo. Una finanza restringida al corto o cortísimo plazo llega a ser peligrosa para todos, también para quien logra beneficiarse de ella durante las fases de euforia financiera.12

11. De todo esto se desprende que la lucha contra la pobreza requiere una cooperación tanto en el plano económico como en el jurídico que permita a la comunidad internacional, y en particular a los países pobres, descubrir y poner en práctica soluciones coordinadas para afrontar dichos problemas, estableciendo un marco jurídico eficaz para la economía. Exige también incentivos para crear instituciones eficientes y participativas, así como ayudas para luchar contra la criminalidad y promover una cultura de la legalidad. Por otro lado, es innegable que las políticas marcadamente asistencialistas están en el origen de muchos fracasos en la ayuda a los países pobres. Parece que, actualmente, el verdadero proyecto a medio y largo plazo sea el invertir en la formación de las personas y en desarrollar de manera integrada una cultura de la iniciativa. Si bien las actividades económicas necesitan un contexto favorable para su desarrollo, esto no significa que se deba distraer la atención de los problemas del beneficio. Aunque se haya subrayado oportunamente que el aumento de la renta per capita no puede ser el fin absoluto de la acción político-económica, no se ha de olvidar, sin embargo, que ésta representa un instrumento importante para alcanzar el objetivo de la lucha contra el hambre y la pobreza absoluta. Desde este punto de vista, no hay que hacerse ilusiones pensando que una política de pura redistribución de la riqueza existente resuelva el problema de manera definitiva. En efecto, el valor de la riqueza en una economía moderna depende de manera determinante de la capacidad de crear rédito presente y futuro. Por eso, la creación de valor resulta un vínculo ineludible, que se debe tener cuenta si se quiere luchar de modo eficaz y duradero contra la pobreza material.

12. Finalmente, situar a los pobres en el primer puesto comporta que se les dé un espacio adecuado para una correcta lógica económica por parte de los agentes del mercado internacional, una correcta lógica política por parte de los responsables institucionales y una correcta lógica participativa capaz de valorizar la sociedad civil local e internacional. Los organismos internacionales mismos reconocen hoy la valía y la ventaja de las iniciativas económicas de la sociedad civil o de las administraciones locales para promover la emancipación y la inclusión en la sociedad de las capas de población que a menudo se encuentran por debajo del umbral de la pobreza extrema y a las que, al mismo tiempo, difícilmente pueden llegar las ayudas oficiales. La historia del desarrollo económico del siglo XX enseña cómo buenas políticas de desarrollo se han confiado a la responsabilidad de los hombres y a la creación de sinergias positivas entre mercados, sociedad civil y Estados. En particular, la sociedad civil asume un papel crucial en el proceso de desarrollo, ya que el desarrollo es esencialmente un fenómeno cultural y la cultura nace y se desarrolla en el ámbito de la sociedad civil.

13. Como ya afirmó mi venerado Predecesor Juan Pablo II, la globalización « se presenta con una marcada nota de ambivalencia » 13 y, por tanto, ha de ser regida con prudente sabiduría.14 De esta sabiduría, forma parte el tener en cuenta en primer lugar las exigencias de los pobres de la tierra, superando el escándalo de la desproporción existente entre los problemas de la pobreza y las medidas que los hombres adoptan para afrontarlos. La desproporción es de orden cultural y político, así como espiritual y moral. En efecto, se limita a menudo a las causas superficiales e instrumentales de la pobreza, sin referirse a las que están en el corazón humano, como la avidez y la estrechez de miras. Los problemas del desarrollo, de las ayudas y de la cooperación internacional se afrontan a veces como meras cuestiones técnicas, que se agotan en establecer estructuras, poner a punto acuerdos sobre precios y cuotas, en asignar subvenciones anónimas, sin que las personas se involucren verdaderamente. En cambio, la lucha contra la pobreza necesita hombres mujeres que vivan en profundidad la fraternidad y sean capaces de acompañar a las personas, familias y comunidades en el camino de un auténtico desarrollo humano.

Conclusión

14. En la Encíclica Centesimus annus, Juan Pablo II advirtió sobre la necesidad de « abandonar una mentalidad que considera a los pobres –personas y pueblos– como un fardo o como molestos e importunos, ávidos de consumir lo que los otros han producido ». « Los pobres –escribe– exigen el derecho de participar y gozar de los bienes materiales y de hacer fructificar su capacidad de trabajo, creando así un mundo más justo y más próspero para todos ».15 En el mundo global actual, aparece con mayor claridad que solamente se construye la paz si se asegura la posibilidad de un crecimiento razonable. En efecto, las tergiversaciones de los sistemas injustos antes o después pasan factura a todos. Por tanto, únicamente la necedad puede inducir a construir una casa dorada, pero rodeada del desierto o la degradación. Por sí sola, la globalización es incapaz de construir la paz, más aún, genera en muchos casos divisiones y conflictos. La globalización pone de manifiesto más bien una necesidad: la de estar orientada hacia un objetivo de profunda solidaridad, que tienda al bien de todos y cada uno. En este sentido, hay que verla como una ocasión propicia para realizar algo importante en la lucha contra la pobreza y para poner a disposición de la justicia y la paz recursos hasta ahora impensables.

15. La Doctrina Social de la Iglesia se ha interesado siempre por los pobres. En tiempos de la Encíclica Rerum novarum, éstos eran sobre todo los obreros de la nueva sociedad industrial; en el magisterio social de Pío XI, Pío XII, Juan XXIII, Pablo VI y Juan Pablo II se han detectado nuevas pobrezas a medida que el horizonte de la cuestión social se ampliaba, hasta adquirir dimensiones mundiales.16 Esta ampliación de la cuestión social hacia la globalidad hay que considerarla no sólo en el sentido de una extensión cuantitativa, sino también como una profundización cualitativa en el hombre y en las necesidades de la familia humana. Por eso la Iglesia, a la vez que sigue con atención los actuales fenómenos de la globalización y su incidencia en las pobrezas humanas, señala nuevos aspectos de la cuestión social, no sólo en extensión, sino también en profundidad, en cuanto conciernen a la identidad del hombre y su relación con Dios. Son principios de la doctrina social que tienden a clarificar las relaciones entre pobreza y globalización, y a orientar la acción hacia la construcción de la paz. Entre estos principios conviene recordar aquí, de modo particular, el « amor preferencial por los pobres »,17 a la luz del primado de la caridad, atestiguado por toda la tradición cristiana, comenzando por la de la Iglesia primitiva (cf. Hch 4,32-36; 1 Co 16,1; 2 Co 8-9; Ga 2,10).

« Que se ciña cada cual a la parte que le corresponde », escribía León XIII en 1891, añadiendo: « Por lo que respecta a la Iglesia, nunca ni bajo ningún aspecto regateará su esfuerzo ».18 Esta convicción acompaña también hoy el quehacer de la Iglesia para con los pobres, en los cuales contempla a Cristo,19 sintiendo cómo resuena en su corazón el mandato del Príncipe de la paz a los Apóstoles: « Vos date illis manducare – dadles vosotros de comer » (Lc 9,13). Así pues, fiel a esta exhortación de su Señor, la comunidad cristiana no dejará de asegurar a toda la familia humana su apoyo a las iniciativas de una solidaridad creativa, no sólo para distribuir lo superfluo, sino cambiando « sobre todo los estilos de vida, los modelos de producción y de consumo, las estructuras consolidadas de poder que rigen hoy la sociedad ».20 Por consiguiente, dirijo al comienzo de un año nuevo una calurosa invitación a cada discípulo de Cristo, así como a toda persona de buena voluntad, para que ensanche su corazón hacia las necesidades de los pobres, haciendo cuanto le sea concretamente posible para salir a su encuentro. En efecto, sigue siendo incontestablemente verdadero el axioma según el cual « combatir la pobreza es construir la paz ».

Vaticano, 8 de diciembre de 2008

Notas:

1 Mensaje para la Jornada Mundial de la Paz de 1993, 1.

2 Pablo VI, Carta enc. Populorum progressio, 19.

3 Juan Pablo II, Carta enc. Sollicitudo rei socialis, 28.

4 Juan Pablo II, Carta enc. Centesimus annus, 38.

5 Cf. Pablo VI, Carta enc. Populorum progressio, 37; Juan Pablo II, Carta enc. Sollicitudo rei socialis, 25.

6 Carta al Cardenal Renato Rafael Martino con ocasión del Seminario Internacional organizado por el Consejo Pontificio para la Justicia y la Paz sobre el tema ‘‘Desarme, desarrollo y paz. Perspectivas para un desarme integral’’ (10 abril 2008): L’Osservatore Romano, ed. en lengua española (18 abril 2008), p. 3.

7 Carta enc. Populorum progressio, 87.

8 Juan Pablo II, Carta enc. Centesimus annus, 58.

9 Juan Pablo II, Discurso a las asociaciones cristianas de trabajadores italianos (27 abril 2002), n. 4: L’Osservatore Romano, ed. en lengua española (10 mayo 2002), p. 10.

10 Juan Pablo II, Discurso a la Asamblea plenaria de la Academia Pontificia de Ciencias sociales (27 abril 2001), n. 4: L’Osservatore Romano, ed. en lengua española (11 mayo 2001), p. 4.

11 Concilio Vaticano II, Const. dogm. Lumen gentium, 1.

12 Cf. Consejo Pontificio para la Justicia y la Paz, Compendio de la Doctrina social de la Iglesia, 368.

13 Cf. ibíd., 356.

14 Discurso a empresarios y sindicatos de trabajadores (2 mayo 2000), n. 3: L’Osservatore Romano, ed. en lengua española (5 mayo 2000), p. 7.

15 N. 28.

16 Cf. Pablo VI, Carta enc. Populorum progressio, 3.

17 Juan Pablo II, Carta enc. Sollicitudo rei socialis, 42; Cf. Id. Carta enc. Centesimus annus, 57.

18 León XIII, Carta enc. Rerum novarum, 41.

19 Cf. Juan Pablo II, Carta enc. Centesimus annus, 58.

20 Ibíd.

Fuente EcclesiaDigital


Defensa de la Humanae Vitae

Alocución televisiva de monseñor Héctor Aguer, arzobispo de La Plata en el programa “Claves para un mundo mejor”
(Sábado 29 de noviembre de 2008)

“Recientemente se ha publicado un libro del Cardenal Carlo María Martini titulado “Conversaciones nocturnas en Jerusalén” y, precisamente, el título podría interpretarse es este sentido: en esa obra el Ilustre Cardenal emite algunas opiniones muy poco claras, más bien obscuras”.

“Opina, o mejor dicho pone en duda, verdades y prácticas sostenidas permanentemente por la Iglesia como el celibato de los sacerdotes, la ordenación sacerdotal reservada a los varones, la inmoralidad de las relaciones homosexuales. Pero donde el Cardenal es muy claro es en su crítica, una crítica muy severa, a Paulo VI y a la Encíclica “Humanae Vitae” de cuya publicación se ha cumplido este año el cuadragésimo aniversario”.

“Llega a decir cosas muy serias como que esta Encíclica ha producido un grave daño con la prohibición de la contracepción artificial que allí se establece, lo cual habría determinado que muchas personas se hayan alejado de la Iglesia y la Iglesia de las personas”.

“Más aún: el Cardenal Martini le imputa a Paulo VI haber ocultado deliberadamente la verdad. Como que nos ha engañado a todos, como que el Papa, en realidad, no estaba convencido de lo que estaba enseñando, pero lo hizo igual. Las críticas continúan porque ahora enfocan también a Juan Pablo II que “siguió el camino de una rigurosa aplicación”, dice el Cardenal Martini, de las prohibiciones de la Encíclica como para mantener las afirmaciones que había hecho Paulo VI en un plano absolutamente indudable”.

“El Cardenal Martini luego propone que la Iglesia tendría que corregir este error. Dice textualmente: “Probablemente el Papa no retirará la Encíclica pero puede escribir una nueva sobre la materia que sea su continuación. Estoy firmemente convencido en que la dirección de la Iglesia pueda mostrar una vía mejor de cuanto no pudo lograr la “Humanae Vitae”, saber admitir los propios errores y la limitación de las propias visiones de ayer es signo de grandeza de ánimo y de seguridad. La Iglesia volverá a adquirir credibilidad y competencia”.

“Llama mucho la atención que un Cardenal, tan importante, tan inteligente, tan destacado, como es el Cardenal Carlo María Martini se haga eco y haga suyas las críticas que dirige y ha dirigido a la Iglesia, durante décadas, esta cultura secularizada y aquellos sectores intraeclesiales que se han manifestado en una postura de disenso contra el magisterio eclesial”.

“En realidad la doctrina de la “Humanae Vitae” sigue una tradición constante que arranca en los Santos Padres. Unánimemente los Padres de la Iglesia han repudiado como inmoral la anticoncepción y cuando las técnicas modernas presentaron nuevos caminos para frustrar la fecundidad del acto conyugal, desde principios del siglo XIX, el magisterio ha sido constante en señalar el recto camino”.

Podemos mencionar entre otros documentos la Encíclica “Casti Connubii” del Papa Pío XI, los numerosos discursos de Pío XII, lo que dice el Concilio Vaticano II en la Constitución “Gaudium et Spes”, los textos de Juan XXIII, la misma “Humanae Vitae” y muchos discursos de Paulo VI y toda la enseñanza de Juan Pablo II, especialmente su teología del cuerpo y de la sexualidad”.

“En la Encíclica “Humanae Vitae” se afirma algo fundamental que tiene que ver con el sentido del amor conyugal y el carácter inseparable del doble significado del acto de los esposos, el significado unitivo y el procreativo. De modo que se juega aquí algo fundamental para la vida cristiana de aquellos fieles de la Iglesia que están llamados al matrimonio”.

“Además, Benedicto XVI ha ratificado expresamente la doctrina de la “Humanae Vitae” y lo ha hecho en varias oportunidades en este año. Quiero citarles un discurso del 10 de mayo donde el Santo Padre dice: “40 años después de su publicación esa doctrina no sólo sigue manifestando su verdad, también revela la clarividencia con la que se afrontó el problema”.

“Benedicto XVI recuerda también que el texto de la “Humanae Vitae” ha sido muchas veces mal entendido y, aún, tergiversado. También señala: “Lo que era verdad ayer sigue siéndolo igualmente hoy. La verdad expresada en la “Humanae Vitae” no cambia, más aún, precisamente a la luz de los nuevos descubrimientos científicos su doctrina se hace más actual e impulsa a reflexionar sobre el valor intrínseco que posee”.
“Se refiere el Papa precisamente, como les decía recién, al significado verdadero del amor conyugal”.

“Estas intervenciones del Cardenal Martini probablemente han obtenido la adhesión de algunos grupos, de algunos sectores de gente que piensa que son planteos inteligentes y a los cuales habría que hacer caso, pero me temo que para la mayoría de los fieles hayan sido escandalosas. Dicho esto con el respeto debido al ilustre Cardenal”.

“Ahora bien: nosotros, si nos dejamos llevar por nuestro instinto católico, sabemos muy bien a lo que tenemos que adherir. Tenemos que adherir a la doctrina constante de la Iglesia y a la enseñanza de Benedicto XVI que es el Pastor que actualmente, a todos, nos guía”.

Mons. Héctor Aguer, arzobispo de La Plata


Hace falta un clamor a favor de la vida

En su reflexión semanal en el programa “Claves para un Mundo Mejor”, Mons. Héctor Aguer, Arzobispo de La Plata, se refirió a los proyectos sobre “abortos no punibles”, destacando que esos proyectos intentan, en realidad, una legalización plena del aborto. (Vid, entre otros, Notivida 556, 558 y 560)
A continuación el texto completo de la alocución televisiva de Mons. Aguer:
“En la Cámara de Diputados de la Nación avanzan, a pasos firmes, proyectos tendientes a la legalización del aborto”.
“Se los presenta como una necesaria legislación sobre casos de abortos que serían no punibles a partir de una ampliación de las excusas absolutorias que se encuentran desde hace más de ochenta años en el artículo 86 del Código Penal de la Nación”.
“Resulta que aquellas eran excusas absolutorias. Es decir, supuesto el hecho del aborto no se lo castiga en dos casos que son cuando se trata de una mujer violada deficiente mental y cuando existe peligro para la vida de la madre. Ahora se los quiere ampliar al caso de toda violación y no limitarse al peligro de la vida física sino incluir también el peligro psicológico y lo que se llama, en la actualidad, peligro social”.
“Aquellas ideas eugenistas, de los años veinte, que llevaron a la redacción de ese artículo del Código Penal, son ampliadas ahora al conjuro de otras ideas, de la idea del derecho a abortar. Se quiere imponer como un derecho de la mujer la facultad de disponer de su propio cuerpo”.

“Lo que más llama la atención: es la absoluta insensibilidad para con la existencia de una nueva vida humana. El niño que se va gestando en el seno de su madre no es una porción del cuerpo materno, sino otro ser; hay certezas científicas y jurídicas que permiten afirmarlo. Hay un estatuto propio del embrión humano que no es posible negar. Pero resulta que del niño por nacer no se habla”.
“Esta legislación de abortos no punible, si llega a salir –Dios nos libre- es sólo un avance; lo que se intenta es, en realidad, una legalización plena del aborto. Este propósito se da sobretodo en los grupos feministas y como un fenómeno transversal en asesores de los cuerpos legislativos”

“Tenemos que hacernos cargo del peligro que se cierne sobre el futuro de la sociedad argentina; hay que mirar las cosas con realismo y hay que llamarlas por su nombre”.
“Con eufemismos y con argumentos sentimentales se está escamoteando una dura realidad: ¿qué idea del hombre y de la mujer, de la sexualidad, el matrimonio y la familia, se manifiesta en la empecinada carrera hacia el aborto legal? ¿Qué quedará de la sacralidad de la vida humana y de la dignidad de la persona?”.
“Sobre el Congreso de la Nación se cierne la sombra de Herodes. ¿Recuerdan ustedes quien fue Herodes el Grande? Aparece su nombre en el Evangelio de San Lucas; fue aquel que mandó matar a los niños inocentes de Belén y sus alrededores, menores de dos años, porque pensaba que de esa manera iba a eliminar al Rey Mesías que, según le habían anunciado, acababa de nacer”.

“Puede parecer exagerado hablar de Herodes en este caso del aborto y de una matanza de inocentes, pero si nos fijamos en la Constitución sobre la Iglesia en el Mundo Contemporáneo, del Concilio Vaticano II, observamos que dice allí que la vida humana debe ser salvaguardada con máximo cuidado desde la concepción y enseguida añade que el aborto y el infanticidio son crímenes abominables”.
“El Concilio Vaticano II asocia por cercanía el aborto y el infanticidio. Ya sabemos que no es lo mismo el niño ya nacido que el niño por nacer… ¿no es lo mismo? No es lo mismo hasta cierto punto, porque es en realidad el mismo sujeto personal en distintos momentos de su desarrollo”.
“Y más aún, hay un dato jurídico interesante: la República Argentina, a propósito de la aceptación de la Convención Internacional de los Derechos del Niño, ha declarado que nuestro país reconoce como niño al fruto de la concepción humana desde el instante de la concepción hasta los 18 años. Por eso hay que hablar de niños, de niños por nacer, cuya vida se convertirá en descartable si se aprueban aquellos proyectos”.

“Les recuerdo esto, sobre lo cual hemos hablado muchas veces con ustedes, porque es necesario que surja de aquí una conciencia muy clara sobre este problema, sobre este peligro; y que surja también un verdadero clamor a favor de la vida. Hay que resolver muchas situaciones de muerte en la sociedad argentina, pero empezamos mal si despreciamos la vida del niño por nacer, si lo condenamos a muerte”.
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NOTIVIDA, Año VIII, nº 562, 22 de noviembre de 2008
Editores: Pbro. Dr. Juan C. Sanahuja y Lic. Mónica del Río
Página web http://www.notivida.org


Tabaré Vázquez presentó los argumentos del veto al aborto

…..
“Se observan en forma total por razones de constitucionalidad y conveniencia las citadas disposiciones por los fundamentos que se exponen a continuación. Hay consenso en que el aborto es un mal social que hay que evitar. Sin embargo, en los países en que se ha liberalizado el aborto, éstos han aumentado. En los Estados Unidos, en los primeros diez años, se triplicó, y la cifra se mantiene: la costumbre se instaló. Lo mismo sucedió en España.

“La legislación no puede desconocer la realidad de la existencia de vida humana en su etapa de gestación, tal como de manera evidente lo revela la ciencia. La biología ha evolucionado mucho. Descubrimientos revolucionarios, como la fecundación in vitro y el ADN con la secuenciación del genoma humano, dejan en evidencia que desde el momento de la concepción hay allí una vida humana nueva, un nuevo ser. Tanto es así que en los modernos sistemas jurídicos –incluido el nuestro– el ADN se ha transformado en la ’prueba reina’ para determinar la identidad de las personas, independientemente de su edad, incluso en hipótesis de devastación, o sea cuando prácticamente ya no queda nada del ser humano, aun luego de mucho tiempo.

“El verdadero grado de civilización de una nación se mide por cómo se protege a los más necesitados. Por eso se debe proteger más a los más débiles. Porque el criterio no es ya el valor del sujeto en función de los afectos que suscita en los demás, o de la utilidad que presta, sino el valor que resulta de su mera existencia".

“Esta ley afecta el orden constitucional (artículos 7, 8, 36, 40, 41, 42, 44, 72 y 332) y compromisos asumidos por nuestro país en tratados internacionales, entre otros el Pacto de San José de Costa Rica, aprobado por la Ley Nº 15.737 del 8 de marzo de 1985 y la Convención Sobre los Derechos del Niño aprobada por la Ley Nº 16.137 del 28 de setiembre de 1990. En efecto, disposiciones como el artículo 42 de nuestra Carta, que obliga expresamente a proteger a la maternidad, y el Pacto de San José de Costa Rica –convertido además en ley interna como manera de reafirmar su adhesión a la protección y vigencia de los derechos humanos– contiene disposiciones expresas, como su artículo 2º y su artículo 4º, que obligan a nuestro país a proteger la vida del ser humano desde su concepción.

“Además, le otorgan el estatus de persona. Si bien una ley puede ser derogada por otra ley, no sucede lo mismo con los tratados internacionales, que no pueden ser derogados por una ley interna posterior. Si Uruguay quiere seguir una línea jurídico-política diferente a la que establece la Convención Americana de Derechos Humanos, debería denunciar la mencionada Convención (Art. 78 de la referida Convención).

“Por otra parte, al regular la objeción de conciencia de manera deficiente, el proyecto aprobado genera una fuente de discriminación injusta hacia aquellos médicos que entienden que su conciencia les impide realizar abortos, y tampoco permite ejercer la libertad de conciencia de quien cambia de opinión y decide no realizarlos más.

“Nuestra Constitución sólo reconoce desigualdades ante la ley cuando se fundan en los talentos y virtudes de las personas. Aquí, además, no se respeta la libertad de pensamiento de un ámbito por demás profundo e íntimo. Este texto también afecta la libertad de empresa y de asociación, cuando impone a instituciones médicas con estatutos aprobados según nuestra legislación, y que vienen funcionando desde hace más de cien años en algún caso, a realizar abortos, contrariando expresamente sus principios fundacionales.

“El proyecto, además, califica erróneamente y de manera forzada, contra el sentido común, el aborto como acto médico, desconociendo declaraciones internacionales como las de Helsinki y Tokio, que han sido asumidas en el ámbito del Mercosur, que vienen siendo objeto de internalización expresa en nuestro país desde 1996 y que son reflejo de los principios de la medicina hipocrática que caracterizan al médico por actuar a favor de la vida y de la integridad física."

“De acuerdo a la idiosincrasia de nuestro pueblo, es más adecuado buscar una solución basada en la solidaridad que permita promocionar a la mujer y a su criatura, otorgándole la libertad de poder optar por otras vías y, de esta forma, salvar a los dos. Es menester atacar las verdaderas causas del aborto en nuestro país y que surgen de nuestra realidad socio-económica."

“Existe un gran número de mujeres, particularmente de los sectores más carenciados, que soportan la carga del hogar solas. Para ello, hay que rodear a la mujer desamparada de la indispensable protección solidaria, en vez de facilitarle el aborto."
El Poder Ejecutivo saluda a ese Cuerpo con su mayor consideración

21 Nov. 08 (AICA)

Uruguay y el aborto: la objeción de conciencia de médicos

Las mutualistas Circulo Catolico y Evangelico advirtieron que no permitirán interrupciones de embarazos. Cuestionan el plazo dado a los medicos para optar.
Médicos e instituciones de asistencia creen que Vázquez vetará la ley del aborto, sin embargo advierten que si prospera puede generar problemas en el Evangélico o el Círculo Católico y rechazan que se fije plazo a las objeciones de conciencia.

De no mediar el veto del presidente de la República, Tabaré Vázquez, a la ley de Salud Sexual y Reproductiva, todos los servicios de asistencia médica deberán practicar la interrupción del embarazo y sólo se permitirá a médicos y miembros del equipo quirúrgico el negarse a realizar un aborto.

Esta situación es preocupante para instituciones que se crearon a instancias de comunidades religiosas, como el Círculo Católico cuyo presidente honorario es el arzobispo de Montevideo, Nicolás Cotugno, o el Hospital Evangélico.
El presidente del Comité de Ética del Círculo Católico, Gustavo Ordoqui, dijo a El País que en las instituciones se confía en el veto de Vázquez y sostuvo que si esta ley entra en vigencia generará serias dificultades a las mutualistas que desde sus estatutos se oponen al aborto.

www.politicaydesarrollo.com.ar, 12-Nov-2008


El aborto es la actitud antimaternal por excelencia

El obispo de San Luis, monseñor Jorge Lona, recordó que “traer un niño a la existencia es un acto de generosidad y entrega, que la sociedad reconoce especialmente” en el Día de la Madre, pero contrastó ese merecido homenaje, con el apoyo y propaganda del aborto que, aseguró, “es la actitud antimaternal por excelencia”.

El prelado lamentó además que “se extienda cada vez más la mentalidad anticonceptiva, que supone un rechazo sistemático al niño, antes de ser engendrado”.

“Son las incoherencias de la cultura de hoy, tal como la transmiten y proponen los medios de comunicación social y el propio sistema educativo”, sostuvo en un mensaje con motivo del Día de la Madre, que se celebra este domingo.

“El amor y gratitud a la madre no se pueden arrancar del corazón humano, pero al mismo tiempo se la desvaloriza en forma creciente. Si este proceso continuara dejaríamos al fin de celebrar el Día de la Madre. Hay países en el mundo que así lo han dispuesto, incluso por ley”, señaló.

Por último, monseñor Lona llamó a pedirle a Dios que “por intercesión de la Madre de Jesucristo y Madre nuestra, permanecer fieles a esa realidad fundamental del amor humano divinizado, que es el pleno y verdadero amor materno”.

AICA
NuevoEncuentro 18/10/08

Canadá: la vuelta a la Humanae Vitae

Por Juan C. Sanahuja

Al concluir la Asamblea Plenaria de 2008, la Conferencia Episcopal canadiense dio a conocer una carta pastoral invitando a todos los fieles y a todas las personas de buena voluntad a “descubrir o redescubrir” la doctrina de la encíclica Humanae Vitae del Papa Pablo VI (1968), en el 40° aniversario de su publicación.
El documento de los obispos canadienses ha sido largamente esperado. Muchos fieles reclamaban de ellos una rectificación de la escandalosa Declaración de Winnipeg del 27 de septiembre de 1968, en la que los obispos de Canadá prácticamente rechazaron la doctrina de la encíclica de Pablo VI, reinterpretándola bajo la óptica del subjetivismo moral, incompatible con la fe católica y la ley natural. (Vid. El Rol de la Conciencia, Matthew Habiger, OSB, L’Osservatore Romano, edición en inglés, 07-10-98, p. 5.)
Aunque el documento del pasado 28 de septiembre no rectifica explícitamente la Declaración de Winnipeg (1968), es una retractación “de hecho”. “La Declaración de Winnipeg, ya no es la posición oficial del episcopado canadiense sobre la Humanae Vitae", declaró a Life Site (29-09-08) Juan Pacheco, director de The Rosarium, un grupo católico que desde hace años ha tratado de obtener de los obispos una reparación de la Declaración de Winnipeg, bajo el lema “no venceremos la cultura de la muerte si no superamos la mentalidad anticonceptiva dentro de la Iglesia”.

El documento
La Conferencia Episcopal de Canadá, declara en el documento final de su última Asamblea Plenaria, que la Humanae Vitae ha de enmarcarse en “la grandeza, la belleza y la dignidad” de la vocación divina al matrimonio.
“La verdad de la auténtica comunión conyugal, como lo enseña la encíclica Humanae Vitae, es la inseparable relación, establecida por Dios, que el hombre por su propia iniciativa no puede romper, entre el significado unitivo y el significado procreador de cada acto conyugal”.
El amor conyugal es un regalo vinculado a la transmisión de la vida, siguen diciendo los obispos. “El aborto, la esterilización y la contracepción están en oposición a la voluntad del Creador respecto a la esencia del acto sexual, porque evitan, si Dios así lo quisiera, la creación de un alma única para un único cuerpo que los cónyuges ayudan a formar”. Y afirman con palabras Pablo VI, “usar este don divino destruyendo su significado y su finalidad, aun sólo parcialmente, es contradecir la naturaleza del hombre y la de la mujer y sus más íntimas relaciones, y por lo mismo es contradecir también el plan de Dios y su voluntad”.
Los prelados canadienses recuerdan que el recurso a los períodos infecundos (vulgarmente llamados métodos naturales), debe ser una decisión en conciencia que toman los esposos con “generosidad y lucidez, manteniendo el orden de prioridades, reconociendo sus propios deberes hacia Dios, ellos mismos, sus familias y la sociedad humana”. Sólo es lícito tomar esta decisión cuando se den motivos graves que la justifiquen.
En el documento del pasado 28 de septiembre, los obispos señalan el estrechísimo vínculo entre la Humanae Vitae y la "teología del cuerpo", desarrollada por Juan Pablo II en 129 intervenciones entre 1979 y 1984, y concluyen “en continuidad con Pablo VI y Juan Pablo II y las enseñanzas de Benedicto XVI, invitamos a los católicos y a todos los hombres y mujeres de buena voluntad a promover y defender la vida y la familia".

Un vacío de 40 años
Para Juan Pacheco, “este impulso de fidelidad a la Humanae Vitae debe trascender el papel impreso. Tiene que haber una vigorosa catequesis sobre el documento en cada parroquia, a nivel de consejeros de parejas casadas. Los obispos deben comprometerse con esta enseñanza, ya que se ha producido un vacío de cuarenta años en su magisterio sobre la cuestión".

NOTICIAS GLOBALES, 07-10-08


USA: fuerte apuesta pro-vida de John McCain

Por Juan C. Sanahuja

La gobernadora de Alaska, Sarah Palin de 44 años será la candidata a vice-presidente de John McCain para las elecciones presidenciales de noviembre en los Estados Unidos. Se trata de una fuerte apuesta del republicano, que de este modo ha impuesto la “agenda pro-vida”, o al menos una parte importante de ella, como un tema principal de la campaña electoral.

Sarah Palin, tiene 5 hijos, uno de ellos con síndrome de Down, en un país que el 80% de esos niños son víctimas del aborto eugenésico. Cuando nació éste, siendo ya gobernadora, Palin, que en contra del consejo de los médicos no acudió al aborto, declaró a Life News: “Supimos por las pruebas de embarazo que tendríamos que hacer frente a desafíos especiales. Nos sentimos privilegiados porque Dios nos confió este regalo y sentimos una indecible alegría por cómo entró en nuestras vidas. (…) Tenemos fe en que cada bebé ha sido creado para un fin concreto y bueno, y tiene potencial para mejorar este mundo. Realmente hemos sido bendecidos”.

Como miembro de Feministas por la Vida participó en iniciativas como las de ayudar a embarazadas en riesgo para evitar que acudieran al aborto; y en servicios de asistencia social para permitir estudiar a jóvenes con dificultades familiares o con problemas de aprendizaje.

Siendo gobernadora, en noviembre pasado, cuando la Corte Suprema de Alaska permitió a las menores de edad acudir al aborto sin consentimiento de sus padres, Sarah Palin declaró que eso era “escandaloso” e instruyó al Fiscal General del estado para que reabriera la causa.

En 2006, se manifestó en contra del reconocimiento legal a las parejas del mismo sexo y, aunque dijo que compartía la preocupación por la discriminación de los homosexuales, afirmó que nunca apoyaría un plan para darles beneficios semejantes al de una familia. “Creo que es más importantes el honor de la estructura familiar”, declaró entonces.
La aparición de Sarah Palin en el escenario político de USA y del mundo, cualquiera sea el resultado de las elecciones, al menos por esta vez, implica que los políticos no podrán evitar definirse sobre temas que hacen a la defensa de la vida humana y la familia.

Sin dar lugar a exagerados optimismos, porque el mismo sistema no lo permite, comienza a verse el fruto del esfuerzo de todos aquellos -entre ellos un buen grupo de obispos de la Iglesia Católica- que lucharon durante años para que los electores -cristianos y no cristianos- pudieran ejercer en conciencia su derecho a votar.

NOTICIAS GLOBALES, 30-8-08

In Memoriam

En la tarde de ayer entregó su alma a Dios el Cardenal Alfonso López Trujillo, quizás el discípulo más fiel Juan Pablo II y de Benedicto XVI en el anuncio del Evangelio de la Vida.

Al trabajo del Cardenal López Trujillo en estos casi 18 años al frente del Pontificio Consejo para la Familia, sin duda le debemos las múltiples y variadas iniciativas en defensa y promoción de la vida y la familia que hoy se desarrollan por todo el mundo.
Desde que se hizo cargo de la Presidencia de ese Pontificio Consejo en 1990 comenzó a promover una gran movilización provida y profamilia. Las reuniones y congresos que impulsó a lo largo y a lo ancho de todo el mundo, como por ejemplo, los Congresos de Movimientos Pro Vida y de Legisladores y Políticos, inspiraron iniciativas y estimularon -sacudiendo la pasividad de muchos- numerosísimos trabajos.

Recuerdo que en 1992 nos convocó a un grupo de sacerdotes de varios países de América en Monterrey (México), su objetivo era que, contando con la ayuda de Dios, tratáramos de que en las estructuras eclesiales se impulsara una verdadera pastoral para promover el valor de la vida humana y la familia, en todos los ámbitos de la sociedad, sin "endulzar" la verdad ni intentar imposibles componendas.
Tenía la certeza que para promover y defender los derechos de la persona y los derechos de la familia no bastaba la acción pastoral "hacia adentro" sino que había que influir -formando, presionando y denunciando- en el ámbito político.

Sin ahorrarse incomprensiones, sinsabores ni heridas, que las consideraba como el riesgo normal de quien combate esta batalla -repitiendo con San Pablo, "pelea el buen combate de la fe"-, no bajó los brazos un solo instante.

"Fue un enorme luchador por la fe, siempre quiso mantener la autenticidad de la verdadera fe y la defendió con palabras y con hechos", dijo esta noche el Cardenal Darío Castrillón Hoyos, Presidente de la Comisión Ecclesia Dei, añadiendo, "defendió los valores cristianos de la vida ante los parlamentos de muchas naciones católicas y no católicas, defendió intrépidamente el derecho a la vida".

Hace unos días, cuando nadie preveía este desenlace, con unos amigos le comentamos que había quienes pensaban que cuando él no estuviera al frente del Pontificio Consejo para la Familia, nosotros dejaríamos de trabajar. "Jamás", nos respondió, "sigan adelante en cualquier circunstancia, nuestra adhesión es a la Verdad, no a una persona".
En 2003, internado en un hospital a causa de su deficiencia bronquial, su sufrimiento era evidente, alguno se compadeció. El Cardenal López, cuando pudo hablar le dijo, "no te preocupes son carezze di la Madonna" (caricias de la Virgen). Hoy, Alfonso López Trujillo, seguramente recibió ya, en el Cielo, una gran caricia de la Santísima Virgen.

Juan Claudio Sanahuja

http://www.noticiasglobales.org ; 20-4-08


El I Congreso Internacional en Defensa de la Vida

6-10 de febrero de 2008 (Aparecida-Brasil)

Declaración de Aparecida en Defensa de la Vida

Canção Nova Notícias, Aparecida (SP)

Nosotros, reunidos en el Santuario Nacional de Nuestra Señora de la Inmaculada Concepción Aparecida, Brasil, del 6 al 10 de febrero de 2008, representantes brasileros y del continente europeo en el I Congreso en la Defensa de la Vida, promovido por la Comisión en Defensa de la Vida de la diócesis de Taubaté, con el apoyo del Consejo Episcopal Latinoamericano y del Caribe (Celam), la Conferencia Nacional de los Obispos del Brasil (CNBB), las Arquidiócesis de Aparecida y de Brasilia, el Santuario Nacional de Nuestra Señora de la Inmaculada Concepción Aparecida, la Asociación Nacional Pro-Vida y Pro-familia, la Federación Paulista en Defensa de los Movimientos en Defensa de la Vida, la Asociación Nacional de Mujeres por la Vida, el Frente Parlamentario contra la Legalización del Aborto, Human Life International, la Alianza Latinoamericana para la Familia, la Agencia Zenit y otras entidades representativas de la sociedad civil, al igual que miembros del Congreso Nacional Brasilero, de las Asambleas Legislativas, de las Cámaras Municipales y de pastorales diversas, procuramos ser una respuesta inmediata a lo que propone la Campaña de la Fraternidad-2008 en Brasil, con el tema «Fraternidad y Defensa de la Vida» y el lema «Escoge, pues, la Vida», habiendo realizado un intenso y profundo intercambio cultural y de experiencias en lo que se refiere al respeto a la vida y a la dignidad de la persona humana, especialistas de las más diversas ciencias y renombradas personalidades de la Bioética con expresos liderazgos nacionales e internacionales, en el esfuerzo de ampliar la conciencia respecto a las innumerables amenazas y ataques sin precedentes contra la familia y la dignidad de la persona humana, las que contrarían la Ley Natural y la garantía del primero de todos los derechos humanos: el derecho a la vida.

La legislación no puede basarse en un mero consenso político, sino principalmente en una moral que se fundamenta en un orden natural objetivo. La sexualidad participa de los derechos y de la dignidad del ser humano y se ex-presa en la felicidad y santidad humanas y en la construcción de la familia según la ley de Dios. Se sitúa también como uno de los primeros frutos de la V Conferencia Episcopal latino-americana y del Caribe, celebrada en este mismo local en mayo del año pasado, cuando el Santo Padre, el Papa Benedicto XVI, en el discurso inaugural de la Conferencia destacó la necesidad de los pueblos de garantizar el derecho a una vida plena, propia de los hijos de Dios, con condiciones más humanas. Dijo que para ello es preciso fomentar la cultura de la vida para desarrollar la plenitud de la existencia humana, en su dimensión personal, familiar, social y cultural. Y ante esto, después de estudiar y re-flexionar sobre esos fenómenos, destacamos:

Desde 1952 se diseñó un programa mundial referido al control mundial de la población del planeta, en especial en los países más pobres. Ese programa fue desarrollado inicialmente por el Consejo de Población, creado en la Fundación Rockefeller, e incluyó la difusión de una mentalidad antinatalista, incluyendo la implantación de anticonceptivos, el aborto legal y otros ataques contra la vida, dentro de una perspectiva geopolítica y eugenésica, en vez de combatir la pobreza invirtiendo en el desarrollo económico de los pobres. Esta mentalidad anti-conceptiva implantada, el aborto y también la eutanasia, se convirtieron en parte de una política demográfica integrada a una política más amplia de globalización, la cual busca la implantación del monopolio. Desde los años ´80, el consejo estratégico elaborado por las grandes fundaciones que promueven el aborto, las políticas de control poblacional han sido camufladas a propósito, bajo la apariencia de una falsa emancipación de la mujer y de la defensa de los pretendidos derechos sexuales y reproductivos, difundidos a través de la creación y del financiamiento de una red internacional de ONGs que promueven el feminismo, la educación sexual liberal y el homo-sexualismo.

La Organización de las Naciones Unidas (ONU), desde la década de 1980, se comprometió con las políticas del control de la natalidad que constituyen actualmente un gran foco de formación. A través de sus organismos han pro-curado cuestionar la Ley Natural Universal y los derechos positivos de cada nación por medio de consensos... imponiéndolos en organismos económicos -el Fondo Monetario Internacional, el Banco Mundial, el Banco Interamericano de Desarrollo, entre otros-, creando así una jurisprudencia dominante en el Derecho Internacional, por la cual se consagra el relativismo de las ideas y de las acciones, dado que tienen sus intereses, en detrimento de los derechos fundamentales de la persona humana, razón ésta de su creación. De este modo, decretar la muerte de las personas humanas no nacidas y de las personas no-productivas, a través del aborto y de la eutanasia, pasó a ser reconocido como un derecho humano.

La Federación Internacional de Planificación Familiar, que constituye la segunda ONG más grande del mundo, luego de la Cruz Roja Internacional, con sus filiales locales en Brasil, sus organismos satélites (como el Grupo Parlamentario Interamericano de Población y Desarrollo), y principal proveedor de máquinas de succión para el aborto precoz, tienen como objetivo la implantación de la anticoncepción, la esterilización, el aborto, y la utilización de profesionales del área de la salud para la aceptación de estas prácticas en todos los países en desarrollo.

El Gobierno, legisladores, profesionales del área de la salud, universitarios, los medios de comunicación social y la clase jurídica han sido presionados y influenciados por los implementadotes de esta cultura de la muerte y del suicidio... (inaudível), proponiendo la despenalización total y completa de aborto, con lo que en la práctica se tornaría libre y por cualquier motivo durante todos los nueves meses de gestación de la persona humana. Sea por omisión o por complicidad, el Gobierno ha cedido a estas presiones, implantando programas o políticas poblaciones, apuntando al control demográfico.

Por todo ello es que denunciamos la implantación de una cultura de la muerte que lleva a la pérdida del sentido de la vida, de los valores éticos y de los derechos naturales, de los que derecho todo el derecho positivo. Denunciamos el intento de descriminalizar y legalizar el aborto en América Latina. Denunciamos el fraude en el campo científico, la manipulación del lenguaje y las autorizaciones estatales que permiten que en nuestros países se fabriquen y se distribuyan fármacos, ácidos para matar seres humanos a partir de sus primeras horas de vida, tal como ocurre con la píldora del día siguiente y con el dispositivo intrauterino (DIU).

Denunciamos los programas estatales para liberar el aborto por vía indirecta, como las normas técnicas del Ministerio de Salud que autorizan el aborto por mera declaración de la interesada. Denunciamos la implantación de una educación sexual escolar hedonista, disociada del amor y centrada en la genitalidad, promoviendo una ideología de género e imponiendo el homosexualismo en las criaturas y en los jóvenes. Denunciamos los intentos de implantar la eutanasia en el país por medio de resoluciones de los consejos profesionales.

Proponemos mantener observadores permanentes en el Congreso Nacional y en otras instancias legislativas en el Congreso Nacional y en otras instancias legislativas, para efectuar un acompañamiento eficaz de las propuestas referidas a los auténticos derechos humanos, a la vida y a la familia.

Aportar acciones legales corregir las violaciones de los derechos humanos aquí denunciadas, sin excepción alguna.

Promover el conocimiento de la Doctrina Social de la Iglesia, por el entendimiento y fidelidad en su vivencia y dentro de la perspectiva del Evangelio de la Vida.

Opción decisiva por la vida humana y por su plena dignidad, implementada por medio de todas las pastorales educativas.

Exigir el cumplimiento de una acción efectiva en defensa de la vida por parte de todas las instituciones, organismos y líderes de poder competentes, el respeto integral de la vida y de la dignidad humana, requiriendo en particular y en primer lugar a la Organización de las Naciones Unidas que decrete la Moratoria para la Pena de Muerte en el mundo, específicamente de los no nacidos, de los ancianos y de los inválidos.

Santuário de Nossa Senhora da Conceição Aparecida, 9 de febrero de 2008.


REINO UNIDO: LIMPIANDO LA CASA.

El Dr Martin Scurr y Lord Fitzalan-Howard, miembros de la junta directiva del hospital católico St. John and St. Elizabeth de Londres, tuvieron que dimitir por oponerse a que el establecimiento volviera a los principios de la ética natural y la moral católica. Después de una investigación, promovida por la Santa Sede, se reveló que el hospital violó los principios del orden natural y de doctrina católica sobre abortos, reparto de anticonceptivos, realización de esterilizaciones y tratamientos de procreación artificial (fecundación in vitro). En el hospital también podrían haberse realizado mutilaciones quirúrgicas y químicas conocidas popularmente como de cambio de sexo. A la renuncia de Scurr y Fitzalan-Howard le seguirá la de Lord Bridgeman, el presidente de la junta directiva, principal promotor de la ética progresista que ha regido hasta ahora en el hospital.

La acción de los laicos

La acción de un grupo de laicos hizo que la Santa Sede iniciara una investigación, cuyo resultado fue que el cardenal Cormac Murphy O'Connor, primado de Inglaterra y Gales, exigiera que el hospital adoptara e hiciera cumplir un código de ética que respetara el orden natural y la doctrina católica. Mons. George Stack, obispo auxiliar de Westminster, fue nombrado en la junta directiva para garantizar que se pusiera en marcha el proceso de reforma del hospital. El grupo de laicos llamado Restituta Group denunció detalladamente ante la Santa Sede que en el hospital no se respetaban los principios de la moral católica. En un proceso que llevó un año y medio, el Restituta Group primero hizo una denuncia formal ante la Nunciatura Apostólica y después se dirigió por escrito al Secretario de Estado, cardenal Tarcisio Bertone, y a la Congregación para la Doctrina de la Fe.

La dialéctica progresista: mutilar la acción de la Iglesia

Los renunciantes, que parece han abandonado de hecho la fe católica, insisten en que ante su “apego a la ética médica clásica y a la negativa de adoptar la mentalidad moderna, la Iglesia debería abandonar su dedicación a la atención de la salud”, una labor en la que, como en muchísimos países, la Iglesia lleva siglos trabajando. "Como he dicho en repetidas ocasiones", dijo uno de ellos, "ahora estamos en una época en que la Iglesia católica debe retirarse de la participación en la asistencia sanitaria de primera línea en el Reino Unido, ya que parece que no está en condiciones de alcanzar el grado de tolerancia al que se ha llegado en cualquier otro lugar del mundo”, y continuó diciendo que la Iglesia se opone al desarrollo científico. Lo que realmente está en juego son los 11 millones de libras que el gobierno pagó al hospital para que en sus instalaciones fueran usadas por grupos médicos del National Health Service, con la condición que fueran “eximidos de cumplir un código de ética católico”.

Fuente: Life Site, 11-12-07. Por Juan Bacigaluppi


Jornada

Se realizó el día sábado 4 de agosto, la Jornada "Ecología Humana", en el salón parroquial de María Auxiliadora. En la oportunidad, disertó el Dr. Jorge Scala, sobre Aborto, prestándose luego a un intenso diálogo con los asistentes. Quedó formada la Comisión Defensa de la Vida, que sesionará los primeros sábados de cada mes; la próxima reunión se efectuará el 1 de Setiembre, desde las 10 horas. La actividad estará encuadrada en la forma que se indica a continuación.

COMISIÓN “DEFENSA DE LA VIDA”

1. Finalidad: Estudiar y difundir la doctrina católica sobre la vida humana, realizando actividades en el marco de la Parroquia, acerca de:

-El respeto a la vida del ser humano, desde su concepción hasta su extinción natural, en toda su plenitud y dignidad.

-El derecho a que la vida humana sea protegida en todos los estadios y forma de su desarrollo, frente a cualquier agresión que la lesione.

-La naturaleza y dignidad de la familia y el matrimonio -de hombre y mujer-, como instituciones naturales en las que la vida se inicia y se desarrolla, y donde encuentra plena realización el recto sentido de la sexualidad, la natalidad y la maternidad.

2. La Comisión Defensa de la Vida, se integrará con aquellas personas interesadas en la finalidad descripta. Los miembros deberán integrar una de las siguientes Áreas, cuyas funciones se describen:

-Documentación: Obtener, clasificar y conservar documentos del Magisterio, estudios científicos, legislación, e información periodística, sobre los temas de bioética.

-Difusión: Preparar y distribuir volantes, afiches y folletos, destinados a difundir la doctrina católica sobre la vida humana, y las actividades pro-vida.

-Formación: Constituir un equipo de expositores, en condiciones de dictar charlas de esclarecimiento acerca de la vida humana.

-Legislación: Analizar las normas legales vigentes, que rigen las cuestiones de la vida, así como los proyectos presentados.

3. Los miembros de la Comisión podrán inscribirse para profundizar en el estudio de uno o más de los temas considerados prioritarios:

-Anticoncepción

-Esterilización

-Reproducción artificial

-Aborto

-Embriones

-Manipulación de órganos

-Eutanasia

-Suicidio

-Violencia

-Drogadicción

4. Organización:

4.1. La Coordinación de la Comisión estará a cargo del matrimonio Beatriz y Mario Moyorga, con el asesoramiento espiritual del P. José Cuesta sdb.

4.2. Se hará una reunión mensual -en día y hora a convenir-, con la asistencia de todos los miembros, durante la cual integrantes de cada una de las Áreas comentarán las novedades producidas, así como las tareas proyectadas. En dichas reuniones, se decidirán las acciones a emprender.

4.3. Los Coordinadores procurarán que en cada reunión, un miembro de la Comisión o algún invitado especial, analice brevemente la doctrina sobre uno de los temas prioritarios. Córdoba, agosto 4 de 2007.

Visite el sitio en Internet de la Comisión:
http://promover-lavida.blogia.com



Jornada

El día 2 de junio de 2007, se realizó en nuestra Parroquia "María Auxiliadora", la Jornada "Conjura contra la Vida". Dictó una conferencia sobre Eutanasia, el Dr. Camilo Tale, quien luego respondió las preguntas del público. Posteriormente, se trabajó en cuatro Comisiones:

A) Aborto y anticoncepción/esterilización

B) Reproducción artificial y embriones

C) Eutanasia y manipulación de órganos

D) Violencia y suicidio

Se realizará una segunda Jornada, con el título de "Ecología humana", el sábado 4 de Agosto, a partir de las 10 horas, en el mismo salón parroquial, con la participación de los asistentes a la primera jornada.

En la oportunidad, disertará el Dr. Jorge Scala, sobre "Aborto", dialogando luego con el público sobre las inquietudes que surjan. A continuación, se dejará constituída la Comisión Defensa de la Vida, que será coordinada por el matrimonio de Beatriz y Mario Mayorga, con el asesoramiento espiritual del P. José Cuesta sdb.

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